sábado, 27 de noviembre de 2004

Era buena revista la JAUJA de Leonardo Castellani, "demasiado" buena. Con sus cosas, por supuesto. Pero releyéndola ahora a casi 40 años, me da que merecía lectores mejores y continuadores. Me parece que no tuvo ninguna de ambas cosas. Y si apareciera ahora, me da que tampoco tendría.

Una de las cosas que más me gusta de JAUJA es lo poética, lo lírica que era. Cuánta poesía. No lo digo como argumento gremial o porque a mí me guste la poesía. Alguien entendía allí que el espíritu tiene su modo de respirar, su modo de inspirar y expirar. Hay quienes creen que la poesía es un arma o una convención. A nadie le gusta que le digan que la poesía es un lujo del espíritu. Para lujos, prefieren canillas de oro en los baños o un crucero por las islas griegas. Lujo y poesía no les "pega". Y si les pega, lo ven como un lujo que no se permiten, o del que pueden prescindir. Porque es un lujo, precisamente.

(Sin ir más lejos, ayer a la noche, tomé examen en la Universidad. Y por esas cosas de las mesas de examen, me toca de segundo un animoso y joven publicitario. La atónita alumna que se presentaba vio cómo de pronto y sin avisar los profesores del tribunal examinador le daban un ejemplo práctico de disputa diálectica, en torno a la naturaleza del lenguaje y el valor de la poesía. Ella aprobó, no se preocupen, y por propios méritos. Pero era simpático verla y oírla discernir la diferencia entre el "lenguaje" gestual y la palabra. Cuando el entusiasta colega dijo, tratando de apuntalar la necesidad del irracionalismo: "eso es lógico para un sistema lógico donde es lógico que eso sea lógico", la joven examinanda espectadora, y expectante hasta allí, entrecerró los ojos, frunció levemente el ceño y bajó balanceando la cabeza. No me pregunten lo que pensaba la pobre, pero tenía cara de que esa finta descontructiva le había resultado...poco poética.)

El caso es que habríamos necesitado más JAUJA, hasta con los baches. Incluso hasta con los baches líricos, porque no todo luce igual allí.

En el número 22, de octubre de 1968, hay unas Glosas a textos atribuidos a San Juan de la Cruz, obra de Héctor Pedro Soulé Tonelli. Copio estas dos:


I
"Del verbo Divino
la virgen preñada
viene de camino:
si le dais posada..."


Al manso pollino
no le pesa nada
la Virgen preñada
del Verbo Divino.

No le pesa nada,
tal como al vilano
no le pesa el grano,
la virgen preñada.

Por el aire fino,
tal como el vilano,
desde muy temprano
viene de camino.

Viene fatigada,
llama a cada puerta
y pregunta incierta
si le dais posada.

II
"Mi dulce y tierno Jesús,
si amores me han de matar,
agora tienen lugar".


Tu hermoso nimbo de luz
anda pégandole fuego
al corazón que yo entrego,
mi dulce y tierno Jesús.

¡Oh, suave lumbre estelar
por la que pena mi amor,
paloma él sea y tu azor
si amores me han de matar!

Si amores me han de matar
¡basta de esquivez y acecho,
presto consúmanme el pecho:
agora tienen lugar!