martes, 18 de octubre de 2005

Copla culta

En medio de El curioso impertinente, una de las novelas intercaladas en el Quijote, aparecen unos versos referidos a la mujer (y a la historia que se cuenta en ese desvío de la obra):
Es de vidrio la mujer:
pero no se ha de probar
si se puede o no quebrar,
porque todo podría ser.

Y es más fácil el quebrarse,
y no es cordura ponerse
a peligro de romperse
lo que no puede soldarse.

Y en esta opinión estén
todos, y en razón la fundo;
que si hay Dánaes en el mundo,
hay pluvias de oro también.