sábado, 30 de junio de 2007

Omnia vincit Amor

Curiosa expresión.

Hay que verla recorrer milenios, desde su primera formulación en la Égloga (X, 69), hasta Benedicto XVI, pasando por Cicerón, san Agustín, Caravaggio o Deep Purple. Y tantos otros, en la literatura, la teología, la música, la pintura.

Por cierto que, ahora, otra vez, de alguna manera, está Venus en el medio.

Y si cuando Marte y Venus jugaban en el cielo de octubre hace casi dos años, podría haber citado el libro IV de la Geórgicas (333 y siguientes, para los entusiastas), ahora le toca el turno a las Bucólicas y la historia de Galo, poeta amigo de Virgilio, y su amor desesperado, contrariado y terrible por una actriz que lo abandonó y se fue a pasar hambre y frío a las riberas del Rhin, de la mano de un oficial de Agripa. El triste Galo, llora a orillas del Ménalo y gime y sueña con la felicidad perdida, rodeado de 'pastores', amigos y ninfas que, al fin, nada pueden hacer. A esto dedica Virgilio la Égloga X, como una especie de consuelo amical.

Rendido, y sabiendo que contra Amor nada podrá, Galo sentencia: omnia vincit Amor, et nos cedamus Amori.

Pues bien.

Estoy escribiendo esto a la hora en que comienza a verse en el cielo a Venus terriblemente brillante junto y casi superpuesto a Saturno. Me dicen que estarán a unos 30º sobre el horizonte, que estarán a 0,7º de distancia. Que Venus brillará 100 veces más que Saturno.

Yo veo otra cosa.

Venus triunfando de Saturno. Venciendo a Saturno, diríamos hoy.

Saturno, el terrible Cronos, el que comía a sus hijos. Como el tiempo. Como el Tiempo. El dios más terrible para los hombres. El que no podemos gobernar y quisiéramos, y tanto. Por eso Cronos se come a sus hijos. Y por eso a Saturno le pusieron Saturno: lento, mucho más lento que todos, circunda el cielo. Lento pero implacable, dirán. Como el tiempo. Como el Cronos.

Y allí está ahora: vencido por Venus en esta tarde de invierno austral.

Omnia vincit Amor.

¿Qué me dirán? ¿Qué esta Venus hecha planeta no es exactamente ese Amor de Galo y mucho menos Aquel Amor? ¿Que uno es el dios Amor, la diosa Venus? ¿Que otro y muy otro Aquel: Ὁ Θεòς ἀγάπη ἐστι? ¿El Dios que es Amor, de san Juan?

Omnia vincit Amor, dice Virgilio que sentenció el poeta-pastor Galo. Y yo le creo al Padre de Occidente. Y no solamente le creo.

En esta tarde gélida y casi húmeda, invernal y austral, estoy viendo en el cielo que dice bien.

No es la única vez que Virgilio 'profetiza'. Y sabrá quien sepa cuántas y cuáles cosas significa lo que estoy viendo en el cielo, que yo no soy profeta.

Veo que Venus triunfa de Saturno. Que el amor vence al Tiempo.

Y veo, sobre todo, que el Amor vence al tiempo.

Y a toda creatura intrépida y valiente que se le acerque lo suficiente.

Y que quiera triunfar cuando es vencida.