sábado, 2 de enero de 2010

Homenagem

El año pasado, me propuse escribir un fado.

¿Por qué? ¿Cómo ‘por qué’?

Supongamos que, entre otras cosas, quería probar que no se puede escribir un fado si uno no es portugués.

Pero, además, quería escribirlo en español como si fuera portugués, para que cuando se tradujera al portugués no hubiera casi merma. Un ejercicio, diría, reflejo: componer en español como si el español fuera la traducción del portugués. Y eso para probar que no se puede.

Me llevó un tiempo, viera. Casi un par de meses. Y lo hice. Lo hicimos, en realidad, porque MM, paciente paulista, me ayudó con acuidad y buen tino a completar la obra. Y allí quedó el asunto, porque el destino que verdaderamente llevaba no lo sabía.

Hace unos pocos días, volvió el fado. Y con oferta melódica. Miré usted. Cuánto honor.

La insistencia, la voluntad de vivir de este pobre fado (pobre en este caso la mano del dizque fadista, claro…), se me hace que me obliga a darlo a la luz, impúdicamente.

ver

Fado del gozo de fado

Fado triste de estos años.
Los ojos que ven pasar
un amor, los desengaños,
como las olas del mar.

Fado de agua de estos ríos
que lavan el tiempo y son
aires de un fado, sombríos
acordes del corazón.

La noche que el fado canta
no tiene estrella ninguna
y es agria miel la garganta
que a un amor desconsolado,
le dice: noche sin luna,
triste amor..., como este fado.

Cuando se olviden las penas,
si olvida el pecho dolido,
el fado que va en las venas
dirá de otro amor perdido.

Y si es fado que no llora,
ojalá ni voz le des.
Sólo al llorar enamora
el fado, si es portugués.

La noche que el fado canta
no tiene estrella ninguna
y es agria miel la garganta
que a un amor desconsolado,
le dice: noche sin luna,
triste amor..., como este fado.

Mas con saudade, algún día,
un fado nuevo dirá
saudades de una alegría
que alguna vez llegará.

Y un día, verás, diremos
–la sola voz, la guitarra–
el gozo que conocemos
del fado que nos desgarra.

La noche que el fado canta
tiene estrellas, ya no es bruna.
Y es luz y miel la garganta
que al único amor amado,
le dice: noche de luna,
dulce amor..., como este fado.
La traducción portuguesa dice:
Fado do gozo de fado

Fado triste destes anos.
Os olhos que vêem passar
um amor, os desenganos,
como as ondas do mar.

Fado de água destes rios
que lavam o tempo e são
ares de um fado, sombrios
acordes do coração.

A noite que o fado canta
não tem estrela a brilhar
e é mel azedo a garganta
que a um amor magoado,
lhe diz: noite sem luar,
triste amor…, como este fado.

Quando se esquecem as dores,
se esquece o peito doído,
o fado que nas veias corre
cantará outro amor perdido.

E se é fado que não chora,
oxalá nem voz lhe dês.
Só ao chorar enamora
o fado, se é portugués.

A noite que o fado canta
não tem estrela a brilhar
e é mel azedo a garganta
que a um amor magoado,
lhe diz: noite sem luar,
triste amor…, como este fado.

Mas com saudade, algum dia,
um fado novo dirá
saudades de uma alegría
que alguma vez chegará.

E um dia, verás, diremos
– a voz solitária, a viola–
o gozo que conhecemos
do fado que nos desola.

A noite que o fado canta
tem estrelas, céu a brilhar.
E é luz e mel a garganta
Que ao único amor amado,
lhe diz: noite de luar,
doce amor…, como este fado.

Tal vez usted no sepa de qué va el fado. No está bien eso, pero puede ser. Pero, si es así, entonces es del todo injusto que crea que se entera por esto que un servidor intentó, haciendo de letrista.

Mejor es oír fado de verdad. Y no: no compare. Oiga.









¿Vio?

¿Entendió?

¿Sí?

Listo.