viernes, 29 de agosto de 2014

Romance del secreto


La noche durmió en la luna
sin decirme dónde estaba.
Ah, si lo hubiera sabido,
¿cómo no ir a rescatarla?
Ya le nacieron rocíos
y estrellas como mañanas;
y la visten en silencio
(para que duerma confiada)
millones de luces tibias
en sus rondas de guirnaldas.
Hay un tropel de perfumes
que sueña la noche clara,
mientras vigila sus sueños
una alondra que me canta.
Me canta una alondra niña
y en secreto silba y habla
de un secreto que me dice
que en secreto se lo guarda.
Y yo le digo en secreto
que un secreto bajo su ala
me dijo que era un secreto
que ella un secreto guardaba.
La noche respira suave
sobre la hierba y las ramas.
Florece la noche quieta
sobre la sierra callada
y en su inocencia dormida
la luna siembra palabras
secretas como un secreto,
calladas como distancias.